Dentro de las estrategias que estás buscando para conseguir ahorrar con la impresión de catálogos hay unas cuantas que te ayudarán a reducir el coste sin perder la calidad de lo que quiera catalogar para su venta o promoción. Algunas de estas técnicas son:
- Buscar exhaustivamente a través de la red las mejores ofertas para poder imprimirlos, teniendo en cuenta que el coste del envío debe incluirse también en el presupuesto total, ya que si la impresión sale más barata pero después le sumas el transporte y te sale más caro, no tiene sentido alguno que hayas encontrado una buena oferta de impresión.
- Otra forma de ahorrar costes es imprimir catálogos pequeños, también llamados “mini-catálogos”. Esta es una técnica utilizada cada vez más por todas las empresas y, además, no se reduce solamente a los catálogos sino que, por ejemplo, hay muchas revistas que se editan ya en “tamaño de bolsillo” con la excusa de que sea más cómodo para el lector cuando en realidad se hace para reducir el coste de la producción.
- Con la impresión más pequeña podrás imprimir el doble de catálogos que con el tamaño normal, o bien podrás imprimir el mismo número pero pagando la mitad.
- Otra técnica es reducir los colores utilizados, cuantos más colores más gasto, lo que significa que si lo haces en escala de grises y le añades únicamente uno o dos colores te saldrá mucho más barato que uno lleno de colorines. Preocúpate de destacar lo más importante y seguirá siendo igual de efectivo.
Aunque imprimir pequeños catálogos te parezca que reduce la eficacia, es todo lo contrario. Muchos usuarios prefieren coger algo que les quepa en el bolso o que puedan llevar en la mano sin que destaque mucho, mientras que un catálogo de tamaño normal puede ser rechazado por muchos al ocupar demasiado espacio.