¿Cómo podrían reducirse los costes de producción de las impresoras tridimensionales? Esta fue la pregunta de la que partió un estudiante de ingeniería para poder hacer más accesible al gran público la tecnología de la impresión 3D.
Y la respuesta que se acabó dando, aunque sorprendente, parece que podría llegar a funcionar si se consiguen solucionar las limitaciones que presenta el prototipo de LEGObot 3D, la primera impresora creada casi íntegramente con piezas de LEGO.
Al parecer, la idea partió de la primera versión de la impresora que creo MakerBot, una empresa dedicada principalmente a la fabricación de impresoras 3D de ámbito doméstico cuyo objetivo es minimizar al máximo los costes de producción.
Así, el creador de LEGObot 3D decidió buscar las piezas Lego que mejor encajaran para montar la estructura y creó un diseño sencillo –que realmente puede ser copiado por cualquier usuario del conocido juego-.
Posteriormente le añadió cuatro fuentes de alimentación, que son las que permiten imprimir con pegamento caliente, y especifica que, debido a que los conocimientos de programación que dispone son limitados, los movimientos de la impresora tienen que ser programados manualmente con el software propio de LEGO, el NXT.
El tutorial para llegar a construirla se encuentra disponible en Instructables y, además, muestra algunas aplicaciones prácticas de esta impresora. Por otra parte, su creador hace referencia a las mejoras que fue introduciendo conforme la fabricaba y especifica los fallos que podrían llegar a corregirse en un futuro –él mismo confirma su intención de seguir investigando para crear modelos más evolucionados-.
Por ello, y si bien es cierto que no posee la capacidad de los modelos comerciales, esta particular impresora puede resultar una buena forma de iniciarse en el campo de la impresión tridimensional a cualquier edad y con medios al alcance de todos los bolsillos.